Igual que con Chile nos hemos despedido de Perú con una lagrimita en la mejilla. Este mes se nos ha hecho muy corto, aunque también ha sido cansado y en algunos momentos frustrante. Como siempre lo más valioso que nos llevamos y que a la vez nos dejamos en el Perú son las personas.
No podemos marcharnos sin una entrada especial dedicada a ellas y ellos. Gente con la que hemos compartido momentos de alegría, de reflexión, conversaciones y silencios. Personas con las que nos hemos sentado alrededor de una mesa, arrodillado en cojines escuchando nuestros latidos retumbar en un cajón peruano, sentados en sillitas de escuela compartiendo la angustia por ese proyecto que tiene tanto de uno mismo que se convierte en un hijo, tumbados en el pasto hablando de cosmovisiones, en el porche de una casa de barro a la orilla de una carretera de montaña desvelando mundos tan distintos y a la vez el mismo.

Energía, inspiración y amor. Yuri ha sido una de las personas clave en nuestro paso por Cusco. Jana y Bruna le adoran.

Chrysoula, coordinadora del proyecto Aldea Yanapay y de voluntarios, aunque pronto lo dejará en manos de Fede. ¡Te esperamos ver pronto en Barcelona!

Fede desborda alegría a todas horas y unas ganas increíbles. En unas semanas sustituye a Chrysoula en la coordinación de voluntarios y de la escuela

Ana cambió París por un rinconcito en el Qosqo. Gracias a la implicación de personas como ella el proyecto de Aldea Yanapay sigue existiendo. Posiblemente sea la coordinadora del proyecto de Lamay.

Xavi trabaja en una asociación de voluntariado, además de hacer bailar a Jana y Bruna a ritmo de rock
También está Eduard y su proyecto con una de las comunidades Saparas en Ecuador, Carmen de Talentum, Carlos y Hugo de Kusi Kawsay, Alex y Raúl de Pukllasunchis, Ángela de Lamay, Chio, Roger, Flor, David y Gloria de Villa Mágica. Y por supuesto está Rosita y todos los niños de Aldea Yanapay, Percy, Anderson, Lis, Flor, Marycielo…
También para aquella gente anónima, como nosotros mismos, con los que nos cruzamos por las calles del Qosqo, que el corrector de la tableta me cambia por “Mundo” una y otra vez. Personas que se nos han quedado en la retina y de las que no sabemos más que esos pocos segundos, quizá algunas palabras, una mirada.

El consumo de la hoja de coca en el Perú es milenario, las propuestas de erradicación no tienen en cuenta la cultura del pueblo
Tampoco nos queremos olvidar de todos esos niños y niñas que hemos visto trabajando en las calles, con sus padres o madres y también solos. Ni de los conductores temerarios que hacen demasiado interesantes los trayectos en combi. Ni de la terrible problemática del machismo y el alcoholismo que marca a fuego gran parte de la población peruana. Ni de las desastrosas cocinas en las que hemos tenido que cocinar. Ni por supuesto de nuestra querida Giardia lamblia, un micrométrico protozoo flagelado que nos ha hecho ir de…
Adiós al Qosqo.

"Adiós al Qosqo, dejamos el Perú" por Sin piedras en los bolsillos (familia Bosch-Pérez) se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Estic molt content per vosaltres, esteu visquent una aventura molt interessant i maca en família.
Que bé que conegueu gent tan interessant! Ja sabia que a la motxilla no tindríeu prou espai per a les nombroses experiències que esteu vivint, però ara veig que encara menys per a la gent tan interessant amb qui us esteu trobant.
Equador, ja tenim ganes de veure com ets!
petonets a tots quatre