Al final nos decidimos. Después de negociar el precio y tras la experiencia del trayecto a Isabela en un speedboat. Volar es mucho mejor.
Aunque es el duodécimo vuelo de este viaje, lo cierto es que los cuatro estamos muy emocionados. No todos los días se vuela en avioneta. Nos despedimos de Elena, Mía y Valia del Sula Sula con las mismas prisas con las que iríamos a coger un vuelo intercontinental, aunque aquí el aeropuerto está a apenas 1km del pueblo y desde la entrada a la pista de aterrizaje Usain Bolt tardaría menos de 10 segundos.
"A 5.000 pies y 110 nudos" por Sin piedras en los bolsillos (familia Bosch-Pérez) se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.